La flor de pascua tan bella como traicionera
La navidad, época para festejar, alegrar y
decorar nuestro hogar. La flor de pascua forma parte importante en las
tradiciones de estas fiestas, considerada la flor de navidad por excelencia.
Sus variadas manifestaciones coloridas en sus hojas (blancas, rojas, salmón,
rosa, amarillo) representan su característica más resaltante. Esta flor, así
como refleja su belleza, es traicionera, pues, cada una de sus partes (tallo,
hoja, flor) contiene altos contenidos tóxicos (alcaloides, fenoles y resinas),
siendo las principales víctimas nuestras mascotas (gastos y perros), quienes al
ingerirla o cuando la introducen por la mucosa sufren diferentes
manifestaciones: trastornos gastrointestinales con vómitos, diarreas, dolor
abdominal, irritación de las mucosas y salivación abundante. El contacto
directo con el látex de la planta puede provocar dermatitis con irritaciones,
picor, edema, e incluso, aparición de vesículas; en los ojos de la víctima
puede provocar trastornos oculares graves según sea la dosis. Tomando en cuenta
estas consecuencias debemos tomar ciertas precauciones, no solo para el cuidado
de nuestras mascotas, sino también para los más interactivos del hogar,
nuestros niños, quienes suelen llevarse todo a la boca. Aunque no es
considerada venenosa para los humanos, el experto en seguridad infantil Martin
Simenc señala “al consumir cualquier cantidad de esta planta u otras puede
provocar molestia estomacal o diarrea”, por tanto, al llevar esta planta a casa,
busquemos un lugar alejado del alcance de niños y mascotas. Y si llegase a
ocurrir un accidente, acuda de inmediato al centro de toxicología más cercano
de su localidad.
Autora: MSc. Laura
Urbina Noguera.